EEl El arquitecto Michael Reynolds construye casas con materiales reciclados autosustentables.
“Se nos esta acabando el petróleo, se nos esta acabando el agua, la población se esta expandiendo. Por muchas razones no tenemos tiempo. Necesitamos hacer algo ya, mañana en la mañana. El sueño americano esta en el inodoro, es historia. Se ha ido. El sueño americano ahora es como sobrevivimos en el futuro. No es tener una casa con 11 habitaciones y 8 inodoros y todos los servicios. No es tener una carrera y un prado. Es simplemente cómo nuestros hijos y los hijos de nuestros hijos puedan siquiera tener una posibilidad de vida.”
Michael Reynolds
Documental : Guerreros de la basura from Aun'el on Vimeo.
En los setenta Michael Reynolds recién casado y un ingenioso arquitecto, comenzó a construir un poblado en un desierto de Nuevo México (EEUU) con latas de cerveza, botellas de plástico y neumáticos viejos.
Viviendas autosuficientes casi en su totalidad en las cuales están integrados invernaderos que proveen de todo tipo de frutas o verduras a los inquilinos, además de un complejo sistema de filtrado de agua.
Este arquitecto estadounidense genero seguidores en todo el mundo, quienes han construido cerca de 2.000 viviendas Earthship (literalmente, nave de tierra). Lo interesante de su proyecto es que constituye no solo un aporte ecológico, son también social, porque a la vez le da utilidad a materiales no reciclables, le soluciona un problema a gente que quizá de otra manera no podría contar con una vivienda propia a bajo costo.
Pero Reynolds encontró barreras en el camino. Sus colegas de arquitectura lo consideraron un subversivo ya que rompió las normas de la arquitectura convencional, y justificaban su negativa a la propuesta en el hecho de que nadie podía asegurarles que esas casas fueran seguras porque estaban construidas con desechos, y además que como los materiales no eran convencionales temían derrumbes.
El mismo gobierno y la ley de su estado le pusieron obstáculos, y estuvieron largo tiempo en su contra, levantando incluso una demanda para prohibir la construcción de estas viviendas, juzgando los terrenos como ilegalmente adquiridos, entre otros. Solo hace unos años reconocen la validez de estas construcciones como viviendas habitables.
Para Reynolds, no fue fácil explicar el asunto "de vida o muerte" que significa optar por esta forma de vivir, para combatir el cambio climático y la dependencia de combustibles fósiles. El explica “No todo el mundo estaba preparado para asimilar esta realidad, tienen mucho miedo”. Tuvo que llegar a adaptar su proyecto a la ley con una presentación más sutil y convencional para que fuera aceptado.
Según Reynold no todo el mundo este preparado para construir su propia casa, por eso el recomienda leer su libro Michael Reynolds (Earthship Biotecture), pues considera irresponsable continuar con nuestro modo de vida, despilfarrando agua y energía.
Su historia es abordada en esta película Garbage Warrior (Guerrero de la basura), exhibida en festivales internacionales, cosechando elogios de la crítica y el público. Es una historia de mucha fuerza, como denuncia y testimonio personal, y ofrece esperanza a quienes quieran optar por un modo de vida respetuoso con el medio ambiente.
Que fenomenal el ingenio humano, la lucha este hombre y su grupo al proponer un sistema de vida autosuficiente y ecosustentable, a pesar de todos los obstáculos políticos que impone el sistema, buscando el control en la forma de vida de las personas. Como muestra el documental, ellos siguieron haciendo su trabajo, ayudando a los necesitados en lugar de derrumbarse, y así es como consiguen al final seguir perfeccionándose y enseñar el método. Es el tipo de ingenio y disposición que necesitamos para los tiempos que vienen, de sistemas de vida cooperativos.
@Michelle Valencia G.- 30.8.2011
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